Normalmente la gente da rienda suelta a sus deditos en esta época para escribir todas las cosas de las que se arrepiente del año que acaba, y las que quiere cambiar el año que se aproxima. Yo en cambio no voy a quejarme de nada, ni arrepentirme de nada, ni prometerme nada a mi misma. Lo que ha pasado este año ya ha pasado, se queda ahí en el cajón de los recuerdos, en el camino que ya he recorrido. Lo que va a pasar en este nuevo aún no lo sé, tengo que ponerme a caminar cada uno de los 366 días (que recordemos que es bisiesto) para ver con qué me encuentro.
¿Propósitos? Ya me los iré poniendo en el camino, si me acuerdo, y los cumpliré o no, si me apetece.
¡FELIZ AÑO 2016! A todas esas personas que se han parado a darle unos minutitos de su vida a leer esta tontería que quería dejar antes de que se acabara el año, y a los que no también.
Besitos, Ani.